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Hasta no hace mucho, las empresas pequeñas, medianas y grandes, tenían una estrategia empresarial muy tradicional, en donde, los directivos o altos mandos eran los únicos responsables en tomar las decisiones sobre la administración y la gestión del negocio. La estrategia Bottom up es sin duda una excelente opción para mejorar la organización de cualquier empresa.

En esta forma de trabajo, las órdenes, las indicaciones y las ideas siempre venían de arriba hacia abajo Top-down, nosotros con la experiencia que tenemos en RRHH en este artículo te mostraremos un nuevo modelo Bottom-up más ágil, flexible y participativo.
¿Qué es la estrategia Bottom up?
Los conceptos de Bottom-up y Top-down vienen de los procesos de información en un software, en la actualidad se han trasladado a otros ámbitos como el psicológico y empresarial. Como su nombre lo dice, Bottom-up significa de abajo hacia arriba, es decir, las ideas y las decisiones van hacia esa dirección.
En esta metodología, todos los empleados sin importar su nivel pueden participar y hacer aportaciones y una de sus más grandes ventajas es que permite que todos desarrollen su potencial. Aquí te compartimos 5 cosas que deberías conocer sobre la metodología del Bottom-Up en las empresas:
- Todos tienen las mismas oportunidades, esto hace que se mantengan motivados, al ser reconocidos sin importar su rango.
- Es una gran ventaja para las empresas creativas, porque hay mayor número de opiniones y se crean más ideas.
- Mejora las relaciones laborales, al fomentar que haya participación entre todos los miembros y ayuda a que todos se involucren.
- Existe un aprendizaje en conjunto, todos comparten su conocimiento para llegar a los objetivos establecidos.
- La toma de decisiones es objetiva, ya que son más las personas que eligen sobre qué camino escoger y hacia donde le conviene dirigirse a la empresa.
¿Cómo se aplica esta estrategia en el reclutamiento?
Si eliges tener un sistema Bottom-up o híbrido, puede aplicarse en todas las áreas, por ejemplo, en el departamento de RRHH para el proceso de reclutamiento y selección de personas, porque como reclutador puedes elegir a prospectos que sean afines a esta metodología.
Los talentos que escojas deben de contar con una personalidad ágil o flexible, tener afinidades con la cultura de tu empresa, así como, tener habilidades como para el trabajo en equipo, comunicación efectiva y ser proactivos.
Si ya tienes una metodología Bottom-up puede ser de utilidad emplear plataformas tecnológicas para ahorrar tiempo, dinero y agilizar procesos de reclutamiento. Escoger una herramienta amerita hacer un listado con las mejores opciones y con las que mejor se adapten a las necesidades de la empresa.